Pasar de la seguridad que mata a la paz esperada Manuel Humberto Restrepo Domínguez Rebelión
   La  seguridad fue convertida en el arma que se arroja para impedir la  realización de los derechos, en especial los asociados a las necesidades  vitales para vivir con dignidad y a la participación en las decisiones  políticas. En nombre de la seguridad con el eufemismo de democrática,  Colombia entró de lleno en el túnel de la confusión, el temor, el miedo a  la institucionalidad del estado, la pérdida de sentido ético y la  negación de la política como efecto de conjunto. Nadie podía ser ajeno a  invocar la seguridad como bandera, ni cuestionar sus éxitos hoy  descubiertos con dolor como aterradoras cifras de engaño. Hubo un giro  de al menos 180 grados en los ejes de paz o guerra. Es cada vez mas  claro que la seguridad fue sostenida con muerte, con cifras modeladas en  el despacho del gobierno, lo que conduce a buscar que la paz que se  pacte entre el estado colombiano y la insurgencia, tendrá que entender a  los derechos humanos como asuntos concretos cuya estructura ética,  so...